El reconocido arquitecto Álvaro Siza junto a Emilio Sánchez-Horneros es el responsable de llevar adelante el proyecto para el nuevo hospital de Toledo. Esta obra, con cerca de 400.000 metros cuadrados, ocupando un área equivalente a un tercio de la zona histórica de Toledo, es considerada la obra de mayor envergadura de su carrera, siendo, además, la mayor obra civil de la provincia española de Castilla La Mancha.
Es la ciudad sanitaria de mayor envergadura de España, con diez edificios independiente y un presupuesto de 300 millones de euros. Las distintas construcciones estarán enlazadas a través de un sistema de viales subterráneos y de otras instalaciones comunes.
Sobre una parcela de más de 36 hectáreas aportada por el Ayuntamiento de Toledo, y con un plazo de ejecución de cinco años (se pretende que esté finalizada para el año 2012), el proyecto contará con las instalaciones más avanzadas del sector hospitalario, entre las que cabe destacar tres tipos de transportes no convencionales (de muestras, robotizado y neumático), así como equipamiento médico de última generación.
Cada uno de los diez edificios albergará un uso especializado, con un número variable de plantas que llega hasta siete en el caso del edificio de Hospitalización, que contará con más de 100,000 metros cuadrados construidos. La ciudad hospitalaria tendrá además su propia capilla, un salón de actos, hotel y guardería. El número de camas previstas es de 800, pero contará con capacidad para albergar hasta a 1,400 pacientes.
Cada uno de los diez edificios albergará un uso especializado, con un número variable de plantas que llega hasta siete en el caso del edificio de Hospitalización, que contará con más de 100,000 metros cuadrados construidos. La ciudad hospitalaria tendrá además su propia capilla, un salón de actos, hotel y guardería. El número de camas previstas es de 800, pero contará con capacidad para albergar hasta a 1,400 pacientes.